El Ayuntamiento asume el coste de unas obras que son competencia de la Comunidad de Madrid para escolarizar solo dos cursos de la ESO, pese a que la ley exige impartir los cuatro. La medida no resuelve la falta de plazas en secundaria y engaña a las familias.
Una de las actuaciones estrella del Ayuntamiento de Colmenar Viejo en educación es la reforma que se está realizando en el colegio Antonio Machado para su conversión en CEIPSO, es decir para escolarizar en secundaria a los alumnos que acaben sexto de primaria sin cambiar de colegio.
En una nota de prensa reciente se ha promocionado esta reforma y se afirma que se han invertido 450.000 euros. Pero estas obras están dedicadas a la escolarización de alumnos de secundaria y por tanto son competencia de la Comunidad de Madrid, que es quien debería asumir el coste íntegro de las mismas y no el Ayuntamiento.
Pero lo que es más grave: en dicha nota se afirma que los alumnos que terminen sexto de primaria podrán cursar primero y segundo de la ESO en el colegio antes de tener que cambiarse a un instituto, algo que harán ya con 14 años para cursar tercero y cuarto.
Esta afirmación genera numerosas dudas al dividir la etapa obligatoriamente en dos centros, pero es que además no tiene base legal.
El real Decreto que regula la creación de centros de secundaria afirma que se deben impartir los cuatro cursos de la ESO, no se puede dividir la etapa y por lo tanto los “medio-CEIPSO” anunciados por Ayuso y por nuestro alcalde son ilegales.
De hecho, la normativa que regula la creación de un CEIPSO en el Antonio Machado no hace mención a la división de la etapa educativa, algo de lo cual nuestros responsables municipales parecen no haberse enterado y siguen repitiendo esta afirmación, lo que supone un engaño enorme a las familias.
El único interés de la administración en hacer un CEIPSO en el Antonio Machado, es la falta de plazas de secundaria en Colmenar Viejo, una población de 60.000 habitantes con tan solo tres institutos.
Se debe dotar urgentemente a Colmenar Viejo de un cuarto instituto. Y se debe dotar a los institutos existentes de los medios necesarios para trabajar con el alumnado y la diversidad que tiene.
Además, se debe facilitar a las familias la conciliación también en los primeros cursos de la ESO.
No queremos ni más anuncios ni más improvisaciones. Queremos simplemente unos servicios públicos de calidad en Colmenar Viejo y en la Comunidad de Madrid.
Vídeo de Fran Arrieta